✨ ¿Por qué nos cuesta tanto permitirnos brillar?

"A veces no es falta de ganas. Es miedo a “ser mucho”.

🌙 Nos enseñaron a ser discretas, no luminosas

Desde chicas, a muchas nos marcaron una idea sutil pero constante: no molestes, no hagas ruido, no te muestres demasiado. El brillo estaba bien… pero en otras. En nosotras, mejor bajarlo un poco.

Y así crecimos creyendo que destacar era peligroso, que lo mejor era “pasar desapercibida”, que si algo llamaba la atención… mejor cambiarlo.


😔 ¿Qué pasa cuando la mirada ajena nos achica?

Nos empezamos a esconder.
A elegir ropa que tape.
A hablar más bajo.
A encogernos aunque tengamos tanto para decir.
A pedir permiso para todo. Incluso para gustarnos a nosotras mismas.

Y sin darnos cuenta, esa mirada ajena (real o imaginada) empieza a decidir por nosotras: lo que nos ponemos, lo que soñamos, lo que nos animamos.


🧥 También nos vestimos para no molestar

¿Te diste cuenta? Muchas veces elegimos ropa no por lo que nos hace sentir, sino por cómo creemos que se ve desde afuera.

“No me pongo esto porque me marca la panza.”
“Esto me encanta, pero capaz es demasiado.”
“Con esto voy a parecer exagerada.”

¿Y si el problema no es la ropa?
¿Y si el problema es esa vocecita que nos pide no brillar demasiado?


🌈 Permitirte brillar es un acto de amor propio

Vestirte como querés, elegir colores que te encienden, salir al mundo con una prenda que te representa… no es superficial.
Es una forma de volver a vos.

De a poquito, vas dejando de disfrazarte de lo que esperan y empezás a vestirte como quién sos.


💌 Este es tu recordatorio

No estás sola si sentís que te cuesta brillar.
Pero también quiero decirte esto, de mujer a mujer:

No hay nada malo en destacar.
No hay nada de malo en que te miren, si vos también te gustás.
No hay nada de malo en brillar… aunque te dé un poquito de miedo.

Al contrario: cuando te animás, inspirás.

🌟 Que tu ropa sea aliada, no obstáculo.
🌟 Que te refleje, que te abrace, que te dé ganas.
🌟 Que cada día te vista un poquito más como vos.

Te lo digo con el corazón,
Lore